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20.08.2020
Después de un descanso de 174 días (¿puedes decir que estábamos contando?), El sábado pasado llegó el momento de que el Campeonato Mundial de Resistencia de la FIA volviera a las carreras. Y lo hizo en una inconfundible y emoionante carrera bajo una lluvia torrencial. La ausencia de espectadores creó una atmósfera embrujada alrededor del paddock vacío, pero eso no quitó la espectacular acción de la pista que amamos del FIA WEC.
Organizar una carrera internacional mientras una pandemia global sigue arrasando en todo el mundo es un desafío abrumador en el mejor de los casos, pero con reglas y precauciones estrictas, el FIA WEC logró volver, aunque con los fanáticos viendo la carrera desde casa en lugar de en las tribunas. Para los equipos y la prensa, existían reglas estrictas y cada equipo básicamente vivía en su propia burbuja sin acceso a nada más que a su propio camión, garaje y hospitality. Incluso antes de la práctica, un susto corrió de arriba a abajo del paddock cuando el piloto de Algarve Pro, Gabriel Aubrey, dio positivo por Covid-19. Posteriormente, se inció con todos los protocolos de bioseguridad para estos casos, aplicando el rastreo de contactos y poniendo a todo el equipo de carreras Algarve Pro en cuarentena en su hotel, así como a algunos otros miembros del paddock con los que estaban en contacto.
Cuando finalmente se reanudó la acción en la pista, tanto las sesiones de práctica como la calificación. Con un cielo brillante y soleado en Spa, el equipo de carreras Rebellion, rápidamente alcanzó la pole con su LMP1 no híbrido. United Autosports repitió su éxito en la carrera de ELMS, cuando partieron desde la pole y, en consecuencia, ganaron cuando Phil Hanson puso al Oreca 07 en la pole por 1,5 segundos. El Racing Team Nederland tuvo problemas durante la calificación. Si bien definitivamente no estaban retrasados en el ritmo, el equipo luchó con la decisión de los comisarios de despojarlos de sus tiempos de vuelta debido al abuso de los límites de la pista, lo que posteriormente los envió a la parte posterior en pista LMP2 sino también a la parte posterior de la grilla.
Cuando llegó el día de la carrera, las condiciones cambiaron drásticamente y, una hora antes de la carrera, comenzó a llover. Como la lluvia intensa no cesó antes de la bandera verde, la primera carrera del WEC desde Austin, ahora hace casi seis meses, comenzó con el auto de seguridad. Esto duró cuatro vueltas. Las condiciones jugaron a favor de los Toyotas híbridos con tracción en las cuatro ruedas, que dejaron atrás a los autos Rebellion como si estuvieran parados.
En LMP2, hubo una remontada espectacular del equipo Racing Team Nederland con Giedo van der Garde a la cabeza. El ex piloto holandés de F1 pasó de la parte trasera de la grilla a tomar el liderazgo con autoridad abordo del auto del equipo United Autosports en menos de dos horas. En cuanto a la pole position, United Autosports, jugó el juego largo y aprovechó las condiciones húmedas poco fiables para retomar el liderazgo con clase, repitiendo su éxito de la carrera ELMS de la semana pasada para fortalecer su posición de liderazgo en el campeonato.
