El pasado fin de semana, la localidad de Cheste (Valencia) fue la encargada de acoger la última prueba puntuable para la Copa de España de Enduro Infantil, tras la anulación en noviembre de la carrera de Sant Mateu a causa del COVID.
Con la salida desde el paddock ubicado en el circuito de velocidad Ricardo Tormo, los pilotos de la categoría de 125, debían completar un total de cuatro vueltas a un recorrido que mayormente discurría por el cauce de un río seco, con mucha piedra y algunas zonas de barro; además de dos especiales cronometradas muy técnicas y que iban a resultar selectivas.
