Conocida como Meringrades, se trata de una cita ineludible del enduro que se lleva celebrando cerca de 30 años; con un recorrido de 45 kilómetros por un terreno muy variado, discurriendo por sendas, caminos de bosque y algunos cruces de ríos, dando lugar a algunas zonas muy técnicas, donde el barro, las raíces y las calzadas empedradas tomaban mayor dificultad con el paso de los pilotos.
